Aquí voy a relataros mi ultimo viaje a los EEUU.
Todo esto surgió porque Quique tenia una semana de trabajo en nashville, y con compañeros de trabajo se había organizado el finde anterior libre en Chicago. Me invito a ir con el, yo solo tenia que ir. Y después de darle algunas vueltas, me decidí y me fui.
Tenia dudas porque no sabia si me iban a dar el finde libre en el trabajo (al final, al haber cambio de temporada, este finde no había casi trabajo), porque lo de irme con 10 compañeros de Quique (eso lo hable con Quique y no problem) y en ultimo lugar porque andaba tocado de la garganta (ese tema no tenia solución, pero podia aguantar)
Pero la idea del viaje tenia muchas cosas buenas. Irme de Madrid el finde con un colega, quería hacer unas compras que no me dio tiempo en Miami, y tenia un buen recuerdo de Chicago (muchos buenos recuerdos)
Total, valore y decidí irme el finde de viernes a domingo.
El vuelo muy, me dieron asiento de ventanilla. Una vez allí había quedado con Quique en el aeropuerto (el iba vía Londres). Y una vez allí primera movida. Quique llegaba con 4h de retraso. Tenia que bajar del aeropuerto al downtown (unos 20km) Un taxi era caro, el bus tampoco era barato, así que me informe y me baje al centro en metro. Un poco largo, pero muy bien. El hotel lo conocía (es el mismo al que van las tripulaciones de Iberia), y con un plano me fui para allá. Lo encontré todo bien, deje la maleta en el hotel y me di una vuelta por la ciudad.
A eso de las 8 hora de allí llegó Quique. Habían quedado a cenar todos sus compañeros del tirón, y allí me plante yo. Me considero un tipo bastante sociable, pero cuando llegue al restaurante estaban todos sentados, esperando la cena. Un palo. Cenamos y los compañeros de Quique se fueron a tomar una copa. La idea era ir nos también, pero quique estaba jodido de la tripa, y entre eso, el cambio horario, decidimos no salir.
Al día siguiente nos levantamos pronto y nos fuimos de compras, ya que a Quique le habían perdido la maleta. Desayunamos el y yo a nuestra bola, y luego quedamos con sus compañeros. El día anterior regular, pero este mucho mejor. Estuve hablando con unos y con otros y gente muy maja. Por la mañana estuvimos dando una vuelta por la ciudad, por la tarde me separe del grupo y me fui de compras un rato. Cenamos juntos y nos fuimos de copas (el tema este de las copas lo comentare en otra entrada, porque fue acojonante. No porque pasase nada extraño fuera de la mariconez habitual, si no por lo zorras que son las muchachas en USA. Por lo menos las que nosotros vimos)
Domingo desayuno, despedida de la ciudad del viento y vuelo bastante tranquilo hasta Madrid.
Y asi en resumen fue este finde en Chicago. Es una ciudad muy bien pensada, limpia, gente maja, bien. Luego con Quique y sus compañeros también bien. Lo que decía antes, un poco de palo al principio, pero luego bien.
Y con quique muy muy bien. Desde aquí mi agradecimiento, por el finde, por sus consejos, y sobre todo por su amistad.
A Chicago si creo que tardare una temporada en volver, a priori...
Besos y abrazos
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