jueves, 13 de marzo de 2008

Dias Malos

Pues si, definitivamente días malos.

¿Porque? Por muchas cosas. Demasiadas. Algunas importantes, otras menos, pero cosas que al final desgastan la moral.

En el trabajo, bien, pero un poco rayado por una cosilla. Quizas son tonterias, pero ando algo preocupado.
Personalmente, últimamente pienso que todas las cosas que he intentado en la vida, las que de verdad importan, en todas he fracasado. Por unas cosas o por otras, pero el final siempre a sido el mismo, fracaso. Esta idea es la que mas me raya ahora mismo.
Fisicamente, me he cascado el gemelo. Primero en el partido con los Tiguerones, y del todo el miércoles en una pachanga con un amigo del trabajo. Ando cojo, tengo una contractura bastante gorda, y me duele al andar.
Además, el Madrid de baloncesto acaba de perder. Se jugaba el todo por el todo, y ha perdido en la prorroga.
Y yo he acabado perdiendo los papeles, y pagando mi frustracion (con Tunceri, con el Madrid, y en general con todo) contra la puerta del salón de mi casa (como si la puerta tuviese la culpa). Además de insultar a todo el imperio otomano (Tunceri es turco), a los Israelitas (jugábamos contra el Maccabi de Telaviv), y otras lindezas que mejor no reproducir. Todo esto a gritos, como es lógico.

Y ahora que.... Pues eso me gustaría saber. De momento nada de decisiones radicales (nada de irse fuera)

A vosotros, mis amigos, daros las gracias por estar ahi siempre. En las buenas, y en las malas (hay que saber estar en las dos). Vosotros sabeis quienes sois.

Poco mas.
No estoy mal, pese a lo que pueda parecer. Hoy solo es un mal día. dentro de una mala racha. Mañana será un dia mejor.

Además no hay mal que cien años dure. Espero que asi sea.

Keep in touch dudes

1 comentario:

  1. No desesperes, Bur, no hay mal que 100 años dure, y al final todo se recoloca y vuelve la normalidad. Además, es buena señal que no hayas mandado tu curriculum para largarte a algún lugar conflictivo dnd poner tu vida en peligro...
    Animo, y piensa en positivo,
    Laura.
    P.D. Sólo te falta ir a ver Rambo para completar una brillante selección para cinéfilos empedernidos...

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