sábado, 17 de noviembre de 2007

Partido 4. De mal en peor

Hey. Hoy volvimos a jugar y perdimos 69-23. Para no liarme, voy a analizar las cosas por partes.

1. El Partido. Lamentable es poco para lo que hemos hecho. Equipo bastante bueno, que movía bien el balón y con un tiro de 4 o 5 metros letal.
En defensa, a por uvas. No salíamos a puntear los tiros, con lo cual nos han frito a tiros de 4 metros. No nos movemos a la vez, no coordinamos la zona, no avisamos los cortes, no ponemos tensión abajo, no salimos a las ayudas, y así podría estar horas.
En ataque, nos han cogido al hombre todo el partido. Y cada uno la guerra por su cuenta, cortamos todos al mismo lado, nadie sabe si juega por fuera o por dentro, porque todos hacemos de todo (o lo que es lo mismo, el caos total) Entradas sin sentido, tiros que no rozaban el aro, contraataques 1 para 4, canastas solos debajo del aro que fallamos, no metemos un tiro libre ni aunque el aro fuese como el Bernabeu...

Lo mejor. Un tapón de Quini. No ha habido lesionados. El debut de Rodrigo y Poch.
Lo peor. El resto.

2. El equipo. Podremos jugar mejor o peor, podremos fallar mucho o poco, pero no podemos hacer lo de hoy.
Creo que como ganamos los dos primeros partidos, nos hemos creído (yo el primero) que sabíamos jugar a esto. Pero NO TENEMOS NI PUTA IDEA
Tenemos que entrenar. Para acoplarnos, y para mejorar físicamente.
Pero lo que me crispa, tanto el otro día como hoy, es la falta de huevos que hay. Somos malos, pero también maricones. Nos falta tensión, testoterona, sangre, orgullo, como queráis llamarlo. El tercer partido me crispe del todo en una jugada en ataque. Tire, falle, me pegue por el rebote, volví a fallar (menuda novedad), vuelvo a pegarme, lo vuelvo a ganar, y cuando me giro, estaba todo el equipo a 5 metros de mis, de espectadores. Y el fondo físico no es excusa, porque para correr para delante si que hay fondo.
Mi hermano sera mejor o peor, pero siempre pone ese plus de garra, de lucha, que nos falta. Nos faltan COJONES

3. Yo. Al final jugué. Lo del otro día no fue una pataleta, estuve bastante rayado. Pero como al final eramos 6 (o eso creía), decidí jugar. Termine mi fiesta en Alcazar de San Juan, dormí una hora y jugar. Me he tomado el partido como una balsa de aceite.
Pero no. No soy así, soy de dar y que me den, de protestar, de poner tensión, de gritar. Intentare controlar mis nervios, pero no puedo jugar como hoy. Porque entonces si que no me compensa los esfuerzos. Hoy no me he quemado (y mira que he / hemos jugado mal), pero tampoco he disfrutado nada.
Así que os aviso, que el próximo partido volveré a gritar, a perder los papeles cuando me saquen de mis casillas, al Showtime del Bure, porque así es mi forma de jugar.

Poco mas. Aqui dejo el acta.

Con Dios

1 comentario:

  1. eso eso. Lo mejor el tapon del Quini que casi revienta la bola.

    ResponderEliminar